Distribución de rana toro (Lithobates catesbeianus) en la región mediterránea de Baja California

Anny Peralta García (1), Edith Andrea Navarro Tiznado (1), Jorge H. Valdez Villavicencio (1), Jeff Alvarez (2), Jeff Wilcox (3), Norma Selene González Gutiérrez (1)

1. Conservación de Fauna del Noroeste A. C.
2. The Wildlife Project
3. Sonoma Mountain Ranch Preservation Foundation

Las especies exóticas son consideradas como la segunda causa de pérdida de la biodiversidad. En México las especies exóticas son un problema que perjudican los servicios ambientales, son responsables de un elevado número de extinciones, transmiten enfermedades y causan daños económicos. Dado el gran número de especies exóticas en nuestro país, la tarea respecto a su control o erradicación es laboriosa y complicada.

Para Baja California, se han registrado 272 especies exóticas, pero, ¿como han llegado estas especies exóticas a nuestro Estado?. Las fuentes de introducción son variadas, desde acciones naturales, como viento, corrientes y fenómenos meteorológicos extremos, hasta aquellas que resultan de actividades humanas, tales como la liberación de mascotas en hábitats naturales, o aquellas que provienen de tierra de jardines o importación de productos de otros países.

¿Qué estamos haciendo?

Fauna del Noroeste trabaja a favor de la conservación de nuestra biodiversidad, y detectamos la necesidad de empezar a realizar acciones para eliminar las amenazas que afectan nuestra fauna nativa. Decidimos empezar con la rana toro (Lithobates catesbeianus) por varias razonas. La primera es por ser una especie invasora: es decir, se dispersa y establece muy fácilmente en nuevos hábitats, causando serios daños a los ecosistemas. Otra razón es porque es una especie catalogada como prioritaria en cuanto a su control o erradicación. Por último, existen métodos para su erradicación que han sido exitosos en California, los cuales pueden replicarse en nuestra región. Por tales razones, se puso en marcha un programa de control de rana toro, que busca a largo plazo la restauración de los humedales en la región Mediterránea de Baja California. El proyecto se dividió en cuatro etapas: 1) distribución y selección de sitio piloto de erradicación, 2) erradicación en sitio piloto, 3) erradicación a lo largo de la distribución y 4) monitoreo.

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Organismos adultos de rana toro, tomando el sol (Foto: Selene González).

La primera etapa del proyecto se logró llevar a cabo gracias al financiamiento de N-Gen (Red de Investigadores del Desierto Sonorense), la Fundación JiJi y National Geographic Society. Esta etapa buscaba determinar la extensión de la rana toro en la región Mediterránea, y determinar el mejor sitio piloto de erradicación, así como producir material de educación ambiental que apoye dichas acciones.

Para determinar la distribución se realizó una búsqueda de registros de rana toro en colecciones científicas. Posteriormente, se identificaron cuerpos de agua y sitios potenciales con presencia rana toro con la ayuda de imágenes satelitales de Google Earth. Así mismo, se visitó cada sitio y se realizaron búsquedas diurnas y nocturnas, así como la toma de datos de parámetros físico-químicos del agua, características del sitio, abundancia de rana toro, y presencia de otras especies exóticas. También se mostraron imágenes de rana toro para ver si la gente local reconocía la especie y podía decirnos de otros sitios donde podría estar presente.

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Biol. Alejandro Romero tomando parámetros fisicoquímicos del agua (Foto: Andrea Navarro).

En total realizamos diez salidas al campo en diferentes zonas de la región Mediterránea de Baja California que corresponden a las localidades de tres municipios del estado. Además de los miembros del equipo de Fauna del Noroeste, también participaron voluntarios como la Biol. Judith Pampa, Biol. Alejandro Romero de la Mora y Biol. Cesar Vélez, y los estudiantes de biología Fernanda Manrriquez e Ismael Plascencia de la Universidad Autónoma de Baja California.

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Poza sin vegetación con presencia de rana toro (Foto: Selene González).

Realizamos muestreos en 18 sitios, de los cuales en 13 se confirmó la presencia de la especie, principalmente en la zona del Ejido Santa Rosa, donde la especie se mostró abundante. Es muy importante recalcar que hace cinco años no se tenían registros de la existencia de rana toro en el Ejido Santa Rosa. Sin embargo, con estos muestreos nos dimos cuenta que esta localidad se encuentra invadida por esta especie.

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Poza en el Ejido Santa Rosa con abundante presencia de Rana toro (Foto: Selene González).
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Renacuajo de rana toro (Foto: Andrea Navarro).
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Masa de huevos de rana toro en el Rancho El Salto, Ejido Santa Rosa (Foto: Selene González).

Como parte de las actividades de educación ambiental, se elaboraron letreros informativos sobre rana toro que fueron colocados en Ciénega Redonda, Rancho Madrigal y Arroyo San Carlos donde la especie está presente. También se elaboraron folletos que complementaron la información y serán distribuidos en los poblados aledaños a las localidades con presencias de rana toro.

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Letrero de rana toro en el Rancho Ciénega Redonda (Foto: Jorge H. Valdez).

Con este proyecto se logro documentar la extensión de la distribución de rana toro, además contamos con un panorama más completo de los sitios de conexión que existen entre las pozas. Usamos esta y otra información para hacer un índice que nos permitió determinar el sitio piloto para iniciar las acciones de control. Elaboramos este índice en colaboración con los expertos de vida silvestre Jeff Alvarez y Jeff Wilcox de California.

Al final de esta etapa, nos hemos dado cuenta de que los sitios con presencia de rana toro han ido aumentando con el paso del tiempo. Existen localidades donde anteriormente no estaba presente la especie y actualmente la rana toro ha colonizado, poniendo en riesgo a la fauna nativa, como lo son la comunidad de insectos acuáticos, la tortuga de poza, el sapo de arroyo y pudieron haber provocado la desaparición de la rana de patas rojas. También se encontraron sitios con presencia de otras especies exóticas como lo son langostinos, distintas especies de peces y tortugas que han sido introducidas intencionalmente. Creemos que la intervención humana a jugado un papel importante para que esto ocurra, y por eso, es necesario poner en marcha un programa de educación ambiental que evite la introducción de especies exóticas en los cuerpos de agua de nuestra región.

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Rana toro devorando un pez (Foto: Selene González).

Si te gustaría colaborar, ser voluntario o únicamente quieres saber más, contáctanos al correo info@faunadelnoroeste.org, o a través de facebook @Faunadelnoroeste.

Si quieres saber más sobre especies exóticas puedes visitar la página de CONABIO: https://www.biodiversidad.gob.mx/invasoras